martes, 23 de junio de 2015

Soldador


Miguel: Mira mamá, ese señor de ahí está haciendo chispas con una máquina.
Mamá: Se llama soldar.
Miguel: Mamí, ese señor que se llama Soldar está haciendo chispas con una máquina y mola un montón.

martes, 9 de junio de 2015

Miguel pierde su primer diente

Todo listo!

Ayer se repitió la historia. Tal y como pasó con Manuel, a los pocos días de cumplir los cinco años, a Miguel se le cayó su primer diente. Él, loco de contento y yo con lágrimas en los ojos. Salió del cole con el ya muy suelto y mientras se lavaba los dientes se le terminó de despegar.

Se puso a chillar emocionado y Daniela y Manuel igual, menuda fiesta se montó en un momento. Lo cogí, lo abracé, lo besé... le dije lo guapísimo que estaba y se fue corriendo a contárselo a su padre y a la vuelta me dice: mami, dame otro abrazo!!!
Es que me lo como!!!

Primero dijo que se lo llevaba al cole a enseñárselo a sus amigos, después lo pensó mejor porque sino no vendría el ratoncito Pérez, después me pidió que se lo contara a su profe por teléfono, después que se lo dijéramos a los titos y a los primos... Lo dicho, una fiesta.

Me preguntó que si de verdad existía el ratoncito Pérez, que por dónde entraba, le dije que claro que existía, que como los Reyes Magos y me dijo que es que los reyes entraban por la ventana ( como si esto fuera tan obvio ).

Esta madrugada ha venido a mi cuarto a decirme lo que le había dejado el susodicho ratoncito, un camión de hot wheels que le ha encantado y por supuesto ha despertado a su hermano para enseñárselo también.

Emocionado se fue al colegio y emocionado ha vuelto, sintiéndose el auténtico protagonista del día.

Así se lo contaba a sus primas pequeñas:



viernes, 5 de junio de 2015

Una intrusa en nuestra cama


Siempre digo que nuestra cama es como el camarote de los hermanos marx. Siempre hay algún niño que viene, otro que se va... Aparece uno y cuando aparece otro, toca llevarse al primero a su cama. Si alguno se levanta para ir al baño, ya no vuelve a su cama, pasan directamente a la nuestra. Hay movimientos de los que ni nosotros mismo somos conscientes y hasta la mañana siguiente no nos enteramos. Pero bueno, van y vienen y aunque hay épocas de máxima concurrencia, ya cada vez más viene siendo la excepción.

Pero desde que pasamos a María a su cama de mayores, no hay día que no amanezca en nuestra cama. A veces viene a las 2, otras a las 4... y además no viene sola, carga con todo lo que pilla, su almohada, la "peppa pig", "la minni"... así que terminamos siendo ciento y la mar en una humilde cama de uno cincuenta. Es más, a veces me acuesto y ya está metida allí!!! sin haber pedido ni permiso.

Por la mañana le preguntas que donde ha dormido y te dice muy fresca: En la cama de mamá y papá. Entonces le preguntas que porque no duerme en su cama y te dice: "Es que no me gusta mi cama de muy mayores", así, con toda su cara dura.

En fin, que es un tema que nunca me ha preocupado, porque tal como han ido viniendo, se han ido yendo, solían ser épocas que coincidían con que estaban malos, rachas de miedos.. pero que pasaban rápido... pero ahora si que me está pareciendo que esta racha está durando demasiado, que ha venido para quedarse y que nos va a costar conseguir que  se quede en su cama.

Como digo siempre a cada rato últimamente... Jo con la cuarta... qué guerra está dando!!!